Diferencias entre alta, media y baja tensión
Es muy común escuchar el concepto “tensión”, “diferencia de potencial” o «voltaje» cuando se habla de electricidad. Si lo analizamos de forma más simple aún, la tensión se describe como la capacidad de hacer que la energía fluya y haga funcionar los dispositivos electrónicos. Los voltajes tienen múltiples rangos para hacer funcionar aparatos eléctricos en diferentes niveles. Sin embargo, para determinar cuál es el más adecuado para cada una de las diversas operaciones, es esencial comprender la diferencia entre alta, media y baja tensión.
Baja tensión
La pregunta inicial siempre es: ¿cómo podemos diferenciar alta, media y baja tensión? Pues bien, la baja tensión generalmente se define como aquella que se encuentra por debajo de 1000 V.
La baja tensión se utiliza comúnmente en el ámbito doméstico, donde se traslada el rango de 100 a 240 V de alimentación para hacer funcionar todos los aparatos electrónicos del hogar. Sin embargo, algunas veces también las áreas comerciales llegan a utilizar rangos de bajo voltaje.
A pesar de que el rango de baja tensión es el menos riesgoso, es necesario tomar las precauciones mínimas: usar guantes y desenergizar fuentes de poder antes de operar.
Media tensión
Para comprender la diferencia entre alta, media y baja tensión, es importante explicar el funcionamiento de los sistemas de media tensión, comúnmente conocidos como sistemas de distribución.
Según los diferentes consumidores, cargas y sus necesidades, los sistemas de media tensión pueden tener diferentes diseños y sus instalaciones suelen manejar potencias nominales entre 1 y 100 kV, y pueden ser monofásicos o trifásicos.
Los transformadores de media tensión pueden ser de tipo pedestal o montado en poste. Generalmente, tienen dos devanados por fase, y son del tipo de refrigeración natural con aislamiento de aceite.
Para evitar interrupciones o accidentes peligrosos, en algunos países las instalaciones de media tensión son consideradas como de alta y se exige proceder con mucha precaución cuando se trabaja con ellas.
Alta tensión
Entre alta, media y baja tensión, la última es la forma de electricidad con mayor tensión eficaz nominal. Por lo general, se usa para alimentar maquinaria industrial o farolas.
El rango aproximado de alta tensión se encuentra por encima de 100 a 345 kV. Se utiliza para transmitir energía directamente desde una central, ya que aumenta la eficiencia de transmisión a una mayor distancia.
Además, se usan una variedad de transformadores para convertir alto voltaje en bajo cuando se requiere distribución de energía en los hogares.
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Aplicaciones
La alta, la media y la baja tensión se utilizan en una variedad de aplicaciones. La baja se usa a menudo en aplicaciones automotrices, marinas y aeronáuticas. También se puede emplear en telecomunicaciones, audio/vídeo, sistemas de seguridad y electrodomésticos —secadoras de cabello y aspiradoras—.
La alta tensión se utiliza en aplicaciones de generación, transmisión y distribución de energía. Además, se puede utilizar en equipos como motores, generadores, transformadores y en medicina —máquinas de rayos X y de resonancia magnética—.
Diferencias principales
Una diferencia clara entre los niveles de tensión es que para la baja se usan cables con aislamiento plástico, mientras que, para alta tensión, se usan cables desnudos aéreos, del tipo coaxiales especiales.
Los disyuntores de media tensión que se usaban en el pasado eran de tipo aceite, mientras que los que se usan actualmente son de gas SF6 o de vacío. La razón principal de esto es que los tipos de aceite tienen un alto riesgo de incendio y fallas y, por lo tanto, requieren más mantenimiento.
Medidas de seguridad
Cuando hablamos de alta, media y baja tensión, cada una representa un diferente nivel de riesgo de trabajo para los usuarios especializados.
En cuanto a la baja tensión, si bien es generalmente inofensiva, se deben tomar algunas medidas de seguridad estándar, como evitar tocar cables dañados o expuestos sin la protección mínima.
Con media y alta tensión, existe un mayor riesgo de descarga eléctrica, el cual podría llegar a causar un daño extremo o letal, al punto de incapacitar al personal expuesto.
Siempre se recomienda usar guantes, protectores faciales y zapatos de seguridad. Además, es necesario seguir las pautas de seguridad de la compañía o proveedor para evitar cualquier daño. Por ejemplo, los equipos de media tensión se colocan generalmente en cubículos metálicos. Debido a los altos riesgos de seguridad, no se debe abrir la celda antes de que el sistema esté completamente desenergizado.
Cuando se trabaja en sistemas de media tensión, la puesta a tierra debe realizarse con cuidado para desenergizarlos por completo, ya que los componentes pasivos —como condensadores e inductores— pueden almacenar energía por periodos cortos.
Los equipos de protección personal (EPP) que se utilizan para sistemas de baja no son adecuados para media y alta tensión. Por lo tanto, se debe utilizar una protección especial que esté certificada de acuerdo con los estándares internacionales.